miércoles, 25 de julio de 2007

¿CUÁNDO ES NECESARIA LA COACCIÓN?

Para saber si una actividad determinada corresponde o no al Estado, hay que preguntar si se requiere o no la fuerza para cumplirse. Las empresas, escuelas, centros médicos, cajas previsionales, etc., ¡no requieren de violencia para funcionar¡ Son cosas que las gentes hacen voluntariamente, por gusto, o al sólo impulso de los naturales apremios de la vida. Este criterio demarcativo permite distinguir y separar correctamente las funciones estatales, propias del Estado, de aquellas otras, indebidamente usurpadas a los entes privados, a quienes naturalmente corresponden.”

José Tapia y Alberto Mansueti/La salida/ Pág. 51
El comunicador y locutor de madrugada,(RPP) como siempre (pues es su trabajo y sabe que la mayoría de peruanos madrugadores lo escuchan), atiende las llamadas, que en realidad son quejas con tonalidad a denuncia, son voces del otro lado que han sufrido algún agravio de parte de… quién?

Voz (mujer mayor): ¡Buenas días¡ quiero decir que estoy yendo al “seguro” y lo que me esta pasando no es justo, estoy mal desde hace tres días y no me atienden como debería ser, soy una mujer mayor y sin embargo tengo que madrugar desde muy temprano para ir a hacer cola, en todo ese frío, para recién me hagan pasar a recoger mi ficha, siempre es así todos los días, no les importa si somos ancianos o personas delicadas pero estas colas son pan de cada día…

El comunicador:
Señora es paradójico lo que usted me dice justo tuvimos una entrevista con el funcionario público de ese sector y me dijo que las cosas están mejorando y que la atención es…

En ese momento, olvidando el frío de la madrugada y las contradicciones entre el servidor público y el público servido, recuerdo que en mi querida ciudad de Iquitos, sucede lo mismo y en este contexto de “crecimiento económico” me pregunto, ¿No existe una salida para este problema?, ¿Cómo hacer que eso y muchos casos más, como la educación, sean eficientes?, Se debe seguir atribuyéndole al estado esas responsabilidades?

Las llamadas continúan y es hasta indignante, conmovedor otros caso pero es increíble cuando los ciudadanos los más afectados con las ineficiencias de los “responsables” no tienen adonde recurrir para buscar justicia (tal vez suene exagerado pero eso es lo que escucho).

Desde un lugar de los andes peruanos entra una llamada, es la de un hombre mayor, con aguardientosa voz. Esta vez la que atiende es una comunicadora y periodista a la vez, quien antes había entrevistado aun congresista sobre el tema el uso de la fuerza para imponer el orden.

Señor: ¡No es posible señorita periodista el gobierno está pasando por sobre la voluntad del pueblo, no puede usar la violencia con armas para acallar las marchas del pueblo, aquí reina el dominio no de la mayoría sino de un pequeño grupo que representa a los poderosos, ¿acaso el gobierno a olvidado que la voz del pueblo es la voz de Dios?...

Comunicadora: Señor gracias por su opinión usted tiene razón pero que otra forma existe para garantizar el orden cuando hay caos sin ocasionar pérdidas de la vidas humanas?, ¿Quién regula eso?...

Y le suceden otras llamadas, pero la de otra señora me volvió a llamar la atención…

Señora: Quiero manifestar mi apoyo a l señor premier y no estoy de acuerdo con lo que dijo el que me antecedió, señorita si alguien no pone orden esto será una ANARQUÍA…

(Foto: My Sister Ruth en la euforia patriótica)

Esta palabra me llamó la atención, ANARQUÍA, ¿Ser libre es ser anarquista? y pensé: En un gobierno liberal que propone un gobierno limitado, ¿Cuál sería su responsabilidad?, pues en todo donde hay necesidad de usar la fuerza, que es la SEGURIDAD, ¿Quién nos puede asegurar una seguridad efectiva tanto interna como externa? Pues es el gobierno el único llamado a actuar como árbitro, no me imagino la seguridad (Policía, fuerzas armadas) en un ámbito privado, no es de su naturaleza.

Otro caso es la JUSTICIA, ¿Quién sería mejor árbitro en un litigio en búsqueda de justicia?, pues el gobierno con un poder judicial neutro y efectivo con magistrados y jueces incorruptibles y altamente calificados (existen ejemplos que funcionan en otros países de primer mundo y les va muy bien).

Y las obras públicas? Pues también es el gobierno quien debería dedicarse sólo a eso, porque por ahí, alguien desde la costa puede decir pero si a mí la construcción de la carretera de la selva no me favorece, ¿Por qué debo asumirla?, pues alguien neutro...el gobierno.

Es una salida a este sistema donde el gobierno es multiuso y acaparador y los resultados hasta el momento no son los que deberían ser pues se está yendo contra su naturaleza. ¡Por qué tiene que intervenir en áreas que no es su naturaleza, cómo la salud? Si esto fuera diferente derrepente la llamada de la anciana y las otras que escuche esa madrugada serían la otra cara de la moneda.


“El Perú necesita un gobierno limitado…”
Mi Prof. José Tapia

BlogsPeru.com






1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola rúben, felicitaciónes por tu blog y aca un comentario.

Cuando se dice anarquía, en cierta medida habla de la libertad de hacer lo que una persona que quiera, desde robar hasta matar. Éste es uno de los postulados extremos del liberalismo el anarco-capitalismo, pero en este último como dices se cree en la seguridad pero desde el sector privado. Pero esta idea sólo crearía más caos, ya que no existiría una fuerza común.

En palabras de F. Bastiat :"Estado no es o no debería ser otra cosa que la fuerza común instituida no para ser entre todos los ciudadanos un instrumento de opresión y de expoliación recíproca sino, por el contrario, para garantizar a cada uno lo suyo y hacer reinar la justicia y la seguridad"

Porqué el estado se atribuye funciones por las cuales no fue creado, y porqué se mantiene, eso es el resultado de la influencia de los grupos de poder, los beneficados con la salud, con la educación,las finanzas,etc. aquellos que piden salarios minimos, estabilidad laboral y beneficios sociales,burócratas o parasitos que dificilmente creen en el esfuerzo y la libertad de crear para progresar, apoyados por el populismo y el caudillismo de siempre.